- En Lugo saben cómo montar y distribuir fiestas.
- A más de 130 km/h el volante de mi coche vibra.
- Los meteorólogos no tienen ni puta idea.
- Las norias van más rápido de lo que pensaba.
- Todo Senegal y todos los bolsos del mundo estaban en Lugo.
- Los hombres que bailan en la orquesta son guays.
- Los hombres que bailan latino son sexys.
- Los hombres que bailan lambada son los más listos de la zona.
Todo comenzó el viernes, cuando tuve que madrugar para tirar para el noroeste español en un viaje rollo padre-hija. Sana y salva, a pesar de que yo conduje más de la mitad del viaje. Nada más llegar nos fuimos con los abuelos a comer el pulpo a la gallega (polbo a feira), tipical tipical y más en SanFro,
Cuando acabó, nos tomamos algo con mi padre y tíos mientras esperábamos a mi prima Alba y a Óscar y entonces nos fuimos a las atracciones. Claro que al ser domingo estaba todo más vacío. En mi vorágine de locura atraccionera decidí montarme en una minimontaña rusa y allá que fuimos a montar el espectáculo Alba, Fer y yo. En un momento dado, el vagón comenzó a dar vueltas mientras bajaba y yo gritaba "aaaaaaaaaah, nos vamos a hacer colacaooooooooooo", a mi prima le daba un ataque de risa, a mí otro y mientras hacíamos estos abdominales entrabamos en una cueva con forma de gato que decía "Ay, que te como!". Surrealista no, lo siguiente. Así salimos en la foto. Para acabar la noche, Fer se hizo una caricatura (si no la pones en tu despacho de abogados no te contrato) mientras escuchábamos una orquesta un poco floja donde se reunieron todos los borrachos. A la mañana siguiente, ya me despedí de Fer entre una lluvia fina que a la hora se convirtió en un sol radiante. Me di un baño de una hora (papá no leas, ahora sabrás por qué la alfombrilla aún no se ha secado) y me fui de comida familiar. La tarde transcurrió con las mujeres de compras, regateando (odio regatear) y tomando chocolatito caliente con churros. Una noche muy familiar, callejeando, con un ambientazo impresionante y con más orquestas; además de exhibiciones de baile con lambada incluida. Y hasta aquí mi puente del Pilar, donde no se puede describir el ambientazo y la cantidad de gente que llenaban las calles de Lugo. Fiestas muy recomendables y ciudad muy recomendable.
Invitados quedáis,
¡¡ Viva San Froilán !!